Desde el Ayuntamiento de Barcelona, bajo la agencia de desarrollo local Barcelona Activa, se promueve Cibernàrium, un programa de capacitación y divulgación tecnológica dirigida tanto a personas que se inician en el uso de Internet como las que demandan formarse a un nivel profesional y/o empresarial.
Como estudiante del máster de Comunicación y Educación me desempeñé como formadora en el Parc Tecnològic Barcelona Nord de marzo a julio de 2011. Antes de ello, recibí una capacitación que incidió en los contenidos teóricos de las cápsulas y talleres así como recomendaciones de tipo práctico para lidiar con situaciones diversas generadas por el temor o poca experiencia de los alumnos ante las nuevas tecnologías.
Los temas aparentemente más sencillos -qué es un ordenador o cómo se usa el teclado y el ratón- resultaban ser complejos de trasladar a una situación de enseñanza, pues un frecuente error es dar por sentado detalles que resultan básicos para que los estudiantes logren comprender. Además, la inseguridad y el miedo se apoderaban de muchos de ellos, probablemente producto de experiencias negativas anteriores . Así que nuestro objetivo ante cada clase era enseñar y dar confianza. Pienso que lo segundo fue más difícil de conseguir.
De Cibernàrium me llevo grandes satisfacciones tanto ajenas como propias. Ajenas porque es muy gratificante ver los rostros de alegría cuando personas en paro o adultos mayores aprendían cómo enviar un correo electrónico o bajarse una bonita imagen de Internet. Propias, porque aprendi que existen varias herramientas -muchas de las cuales empleo en la actualidad- que me son de utilidad tanto en mi vida personal como profesional.
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