Habiendo trabajado en un colegio durante varios años, he sido testigo de la ardua labor de la mayoría de los docentes, quienes además de enseñar la materia correspondiente, se convierten en segundos padres y madres. Como todo ser humano tienen sus propios problemas pero hacen el esfuerzo porque éstos no afecten su quehacer pedagógico.
No obstante, son pocos los que de forma efectiva emplean las nuevas tecnologías de la comunicación y la información en sus actividades instruccionales. ¿A qué se debe esto? ¿Falta de dispositivos tecnológicos en la escuela?, ¿inadecuada o nula capacitación en dichas tecnologías?, ¿dificultad para desprenderse de paradigmas tradicionales de la educación?, ¿reconocen la necesidad de implementación de las tecnologías en la escuela pero no saben cómo hacerlo?
Un cambio de actitud no se lleva a cabo de forma inmediata, pero eso no quiere decir que no se haga o diga cosa alguna. Trabajar con los maestros para sensibilizarlos y motivarlos es fundamental. Por tal motivo, presento una propuesta de lo que sería la primera sesión de un taller para contribuir al desarrollo de competencias básicas para enseñar en el contexto de la sociedad de la información.
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